Desde el marco legal apropiado hasta las cuestiones éticas y la responsabilidad digital: el estudio “SocAIty” 2021 de la Iniciativa &Audi examina la dimensión social global de la conducción autónoma. En el proceso, destacados expertos de Europa, EE.UU. y Asia opinan desde sus diversas perspectivas e inician así un discurso continuo sobre la movilidad del futuro.
“Después de la electromovilidad, el siguiente cambio, claramente más radical, es la transición hacia vehículos más inteligentes y, en última instancia, autónomos”, afirma Markus Duesmann, CEO de AUDI AG. “Para nosotros, la conducción autónoma es una tecnología clave que puede hacer el tráfico más seguro y la movilidad, más cómoda e inclusiva”. Con CARIAD, la empresa de software del Grupo Volkswagen, Audi impulsará la rápida introducción de esta tecnología en la segunda mitad de esta década.
Tanto la madurez tecnológica de los sistemas de conducción autónoma como la dimensión social son muy importantes para que la conducción autónoma tenga una amplia aceptación: además de las condiciones legales y políticas generales, la actitud de las personas es fundamental para la implantación de nuevas tecnologías como la conducción autónoma. Un grupo de diecinueve miembros integrado por científicos, políticos y expertos en economía han debatido sobre cuestiones claves relativas al futuro de la conducción autónoma. Los resultados se recogen en el estudio de alrededor de 70 páginas “SocAIty”, publicado ahora por la Iniciativa &Audi.
En las grandes ciudades prevalecen cada vez más necesidades similares: lugares como Nueva York, Londres y Shanghái tienen condiciones y necesidades básicas comparables en cuanto a movilidad, flexibilidad y expectativas de los clientes. La mayoría de los expertos ven a los Estados Unidos como impulsores de la tecnología de la conducción autónoma. No todas las nuevas tecnologías se desarrollarán necesariamente allí en primer lugar, pero se pondrán en marcha con la ayuda de capital y experiencia. “Se podría decir que si Estados Unidos prueba algo, crea una especie de incubadora, mientras que en China se despliega y se prueba en masa”, añade Lexen.
China se considera pionera en la escalada y la penetración de la conducción autónoma. Las razones para ello son una decidida expansión de las infraestructuras y un alto grado de aprecio social por las nuevas tecnologías. En opinión de los expertos, Alemania y Europa serán sobre todo lugares de innovación para las tecnologías de los vehículos y la producción de grandes volúmenes, además de desempeñar un papel importante como mercados de venta dentro de diez años. En consecuencia, la normativa europea sobre derechos de los consumidores y protección de datos influirá en las condiciones globales y en los estándares de los productos de toda la industria.